miércoles, 21 de noviembre de 2012

Lo bueno y lo malo del chupete


El chupete es un objeto con una parte de goma o material similar, en forma de pezón que se le da a los niños para que chupen. Los padres lo utilizan con el principal objetivo de tranquilizar y calmar al bebé. La necesidad de succionar del bebé es más fuerte durante los primeros meses de vida.

Porqué los padres introducen el uso del chupete?
  • Para regular el horario de alimentación y sueño. Según el doctor Elías Jiménez no es recomendable el uso del chupete en bebés recién nacidos ya que el riesgo de aspiración de su propio vómito es mayor en un niño pequeño con chupete.
  • Disminución del dolor y el llanto que producen los cólicos del lactante. El chupete puede favorecer que el niño trague mas gas, y este cólico tiene relación con la producción de gas en el intestino.
  • Para evitar que el niño adquiera el hábito de chuparse el dedo.

Lo recomendable es que el bebé empiece a usarlo después del primer mes de vida y abandonarlo a los 10 meses. Siempre utilizarlo siguiendo una estricta limpieza y en períodos cortos.
Su uso es ya habitual en nuestra sociedad con la finalidad de calmar al bebé y ayudarle a conciliar el sueño, además se afirma que disminuye el riesgo de muerte súbita en el lactante. Pero recientes estudios hablan de algunos riesgos como accidentes, disminución del estímulo y el vaciado del pecho materno, lo que conduce a una disminución de producción láctea que podría desembocar en un destete precoz.
Tanto los chupetes como los dedos pueden causar problemas de maloclusión dental, esto es, las dos arcadas dentarias no encajan correctamente al realizar la mordida. Pero los problemas que ocasiona no son solamente dentales, ya que se ha observado que está asociado a otras patologías como otitis media aguda.


La tartamudez infantil



La tartamudez es un problema de fluidez en el habla que comienza entre los 2 y 4 años y en algunos casos pueden desaparecer sin tratamiento, pero en otros casos pueden continuar hasta la edad adulta.

A continuación os dejo una serie de consejos o recomendaciones a tener en cuenta en aquellos casos en que los niños presentan este problema:

  1. Mantener el contacto ocular al hablar con el niño mostrando interés y haciéndole ver que lo ha entendido
  2. Dedicar todos los días tiempo para hablar con el niño en una situación agradable y demostrándole que disfruta hablando con él
  3. No mostrar preocupación a las faltas de fluidez, por el contrario sí prestar atención e interés por lo que dice
  4. Hablarle despacio para que pueda entender mejor lo que se le está diciendo y le resulte más sencillo elaborar la respuesta (una manera de hacerlos es alargando las sílabas)
  5. Darle tiempo para expresarse y lo que es muy importante es dejarle hablar y no terminarle las frases
  6. Hablarle con frases cortas y sencillas (aproximadamente del número de palabras que dice por frase)
  7. Al dirigirse a él se debe emplear un vocabulario adecuado a su edad
  8. Durante una conversación no es aconsejable hacerle demasiadas preguntas (en especial aquellas que requieran de respuestas largas)
  9. No presionarle a la hora de hablar con otros adultos que él no quiera ya que incrementaría su grado de nerviosismo y con ello dificultar más la fluidez
  10. No referirnos a él como "tartamudo"ya que podría afectar a su autoestima
  11. No darle consejos en el momento en que cometa errores tales como "respira", "habla despacio", "tranquilo"...
  12. No corregirle ni hacerle repetir lo que acaba de decir
  13. No hacer de la tartamudez un tema tabú
  14. Reforzar sus aspectos positivos y así proporcionarle mayor seguridad en sí mismo
Utilizando estos consejos será mucho más fácil para el niño afrontar su problema.



Células madre del cordón umbilical

Las células madre son células que pueden dar lugar a otras células. También se les llama troncales. Son células inmaduras o indiferenciadas que se caracterizan fundamentalmente por:
  • Capacidad para diferenciarse en otro tipo de células
  • Pueden dividirse y hacer copias de sí mismas.
  • Pueden formar nuevos tejidos. 
Estas células madre adultas se pueden obtener de diferentes tejidos, entre ellos la sangre del cordón umbilical. Las células madre que más se utilizan en tratamientos son las hematopoyéticas, cuya fuente más común para los niños es el cordón umbilical. 

Las células madre hematopoyéticas se emplean en el tratamiento curativo de diferentes enfermedades hematológicas. Se usan con éxito en leucemias y linfomas. En enfermedades no cancerosas se han empleado en el tratamiento de enfermedades graves como la talasemia y la anemia de células falciformes, alteraciones congénitas del metabolismo, inmunodeficiencias y aplasia medular. 



A continuación os muestro el enlace de una noticia que habla de un caso concreto de un niño tratado con células madre:

http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/11/05/actualidad/1352144640_784058.html


También os presento a continuación el caso de Izam un niño de once años con una enfermedad hereditaria y degenerativa salvada por las células madre del cordón umbilical de sus hermanas gemelas:

Fiebre en la infancia

Hola a todos!
Hoy os traigo un tema muy común en niños, ¿cuántas veces no has tenido fiebre de pequeño? pues bien, hoy os voy a hablar un poquito de sus causas, tipos, tratamiento.. Y para el final guardo una sorpresa para todas las mamis.

Fiebre en niños.


Como todos sabemos la fiebre es la elevación de la temperatura corporal por encima de los valores normales, que oscilan entre 36.7-37ºC. Estos valores pueden variar según tomemos la temperatura en la boca (aumentando entre 3 y 5 décimas de la tomada en la axila) o en el recto (aumentando entre 5 y 10 décimas).
Además debemos saber que la temperatura varía con la edad y también según la tomemos por la mañana o por la tarde como podemos observar en la tabla.

EDAD
TEMPERATURA
3 MESES
37.4 +/- 0.4
6 MESES
37.5 +/- 0.3
1 AÑO
37.6 +/- 0.2
3 AÑOS
37.2 +/- 0.2
5 AÑOS
37 +/- 0.2
7 AÑOS
36.8 +/- 0.2
9 AÑOS
36.7 +/- 0.2
11 AÑOS
36.7 +/- 0.2
13 AÑOS
36.5 +/- 0.2

Entre las causas encontramos:
  • Enfermedades infecciosas.
  • Insolación o golpe de calor.
  • Causa hormonal.
  • Esfuerzos musculares (deporte, crisis tetánica, ataque epiléptico).
  • Hipertermia maligna.
  • Intoxicación.
  • Después de algunas vacunas.
  • Dentición. 
Dentro de la fiebre, podemos hablar de varios tipos:
  • Fiebre continua: la temperatura se mantiene elevada continuamente.
  • Fiebre remitente: la temperatura oscila 1 o 2 décimas con tratamiento pero no vuelve a la normalidad.
  • Fiebre intermitente: la temperatura oscila en picos.
  • Fiebre oscilante: la temperatura oscila en diferentes valores a lo largo del día.
  • Fiebre ondulante: la temperatura suele aumentar hasta los 40ºC.
  • Febrícula: la temperatura se mantiene constante en 38ºC.
  • Hipotermia: la temperatura se encuentra peligrosamente baja, por debajo de 35ºC.
  • Hipertermia: la temperatura se encuentra por encima de los valores normales.
Es importante vigilar los síntomas que puede manifestar el niño como la pérdida de apetito, vómitos o dolor abdominal, llanto persistente, dolor de garganta, somnolencia excesiva, dolor de oído, cefalea excesiva.. para el posterior tratamiento de la misma.

Si el cuadro persiste debemos acudir al médico en caso de:
  • Niños menores de 2 meses si la temperatura es continua y mayor de 38.5ºC rectal.
  • Niños mayores de 2 meses con temperatura continua y mayor de 38.5ºC rectal y síntomas de enfermedades asociadas.
  • Niños de cualquier edad con una temperatura mayor de 40ºC rectal.
  • Niños con temperatura continua que no cede días después de antitérmicos.
Para intentar bajar la fiebre:
  • No debemos envolver a alguien que tenga escalofríos.
  • Debemos quitar el exceso de ropa.
  • Dar un baño tibio.
  • No debemos usar baños fríos, alcohol ni hielo.
En cuanto a comer y beber debemos saber que es fundamental la ingesta de líquidos y comidas ligeras.

Si la fiebre es leve, no nota ningún otro síntoma y el niño juega, come y bebe bien, está despierto y sonríe, tiene un color de piel normal y luce bien cuando le baja la temperatura probablemente no se trate de una enfermedad importante.

Os dejo este vídeo con unos consejos para tratar la fiebre..



Y por último, lo prometido es deuda..
Recientemente, se ha elaborado un pijama con un tejido especial capaz de identificar las variaciones térmicas. Dicho pijama lleva incorporada una cinta, que en contacto con el cuello cambia de color si el paciente presenta un aumento de temperatura.
Si quieres saber más pincha aquí


HASTA PRONTO..